“No hay mensaje inocente” Comienza la campaña en las comunas menos favorecidas de Medellín

 La institucionalidad (Personería y Fedemedellín) condecoran a personajes altamente cuestionados. ¿Dónde está la ética?

Desde hace tiempo diferentes voces, tales como el Concejo de Medellín, medios de comunicación la Veeduría Ciudadana al Plan Estratégico de la Comuna 6, otras veeduría de la ciudad y la investigadora Gloria Patricia Jaramillo Aristizábal (Tyche), entre otras, han advertido sobre la cooptación de los espacios de participación ciudadana y de los recursos públicos en Medellín. 

Todas coinciden en señalar al señor Alexis Heriberto Castrillón Jiménez y su familia, como los responsables de la implementación de un presunto entramado de corrupción en el programa Planeación del Desarrollo Local y Presupuesto Participativo, situación que hoy se encuentra bajo investigación. 

Imagen tomada de Facebook 

A pesar de las denuncias y de las evidencias, Castrillón Jiménez reapareció recientemente en un evento de la Personería del Distrito de Medellín, donde fue homenajeado por la Federación de Juntas de  Acciones Comunales del Distrito (FEDEMEDELLÍN). En la fotografía oficial, el llamado patriarca del “Clan Castrillón Arboleda” recibe un reconocimiento que lo exalta como líder ejemplar y comprometido con el desarrollo comunitario.

"Desde la Federación de Acción Comunal del Distrito de Medellín destacamos el compromiso y liderazgo del Presidente de Asocomunal # 6 Doce de Octubre

Alexis Heriberto Castrillon Jiménez

quien con su trabajo constante fortalece el movimiento comunal y contribuye al desarrollo de nuestras comunidades.

Su labor ejemplar refleja el espíritu solidario, participativo y transformador de la Acción Comunal en nuestra ciudad." Publicación de FEDEMEDELLÍN en su pagina de Facebook, 4 de noviembre de 2025 1:56 

La escena, en la cual, también aparece el actual personero del distrito de Medellín, Sr. Mefi Boset Rave Gómez, para muchos, parece una burla, y de ahí el titular de este escrito: “No hay mensaje inocente”. El acto no es casual. Castrillón Jiménez, conocido por sus prácticas de cooptación política en la Comuna 6 desde por lo menos 2015, ha consolidado un fortín electoral que resulta atractivo para los viejos caciques de la politiquería local y departamental. En este contexto, el homenaje parece más un intento de lavado de imagen con fines electorales que un reconocimiento genuino.

Detrás de su aparente liderazgo, Castrillón Jiménez ha sabido moverse entre alianzas convenientes, ofreciendo su influencia y capital electoral a cambio de cargos, contratos y respaldo institucional. Una estrategia que, según denuncian los líderes comunales, se ha sostenido a costa de las verdaderas necesidades del territorio.

Más inquietante aún es el grupo de seguidores que lo acompaña: un círculo de pseudo líderes que, por necesidad o conveniencia, respaldan su estrategia. Como en la conocida relación amo–esclavo de Hegel, Castrillón Jiménez ordena y sus fieles obedecen, alimentando su ambición económica y su poder político.

Y es aquí donde surge una reflexión más profunda. Este tipo de liderazgos se nutren del abandono y la pobreza. De personas que, resignadas a un mínimo bienestar, terminan perpetuando las mismas prácticas que los mantienen sometidos. Como escribió Anthony de Mello, “vivimos en una piscina llena de mierda hasta el cuello, y nuestra mayor preocupación es que nadie levante olas para que no nos salpique la cara”.

Muchos prefieren quedarse dentro de esa piscina antes que salir de ella. Y ese es, quizás, el mensaje más preocupante de todos.